Israel ya tiene nuevo ministro de Defensa, se llama Avigdor Lieberman y la decisión será oficial en las próximas horas. El ex ministro de Exteriores, nacido en Moldavia, líder del ultraderechista partido Israel Beitenu (Israel nuestra casa) y residente en una colonia, sustituye a Moshé Yaalón. El relevo no ha sentado bien al ministro saliente –responsable de la última ofensiva en Gaza en la que murieron 2.251 personas, en su gran mayoría civiles, del lado palestino, según cifras de la ONU, y 73, incluyendo 67 soldados, del lado israelí- que anunció el viernes que se apartaba de la vida política durante una temporada. Esta disputa por la cartera de Defensa y la elección de Lieberman, que durante la última campaña electoral abogó por “coger un hacha y cortar la cabeza” a los árabes israelíes contrarios al país, provocó la reacción de figuras de la política israelí como el ex primer ministro Ehud Barak, que alertó de las “semillas de fascismo” presentes en el nuevo ejecutivo. En una entrevista concedida al Canal 10 de la televisión israelí Barak declaró que “el sionismo que anhela la vida y las semillas del fascismo no pueden coexistir” y calificó el relevo en Defensa como “una purga”.
Netanyahu mueve ficha pocas semanas después de que el general Yair Golán, número dos del jefe del estado mayor, denunciara “tendencias nauseabundas” en el Israel contemporáneo similares a las de la Alemania nazi de los años treinta. En plena ceremonia del Día del Holocausto, el general Golán declaró que “si hay algo que me asusta en el día del recuerdo del Holocausto es apreciar las nauseabundas tendencias que tuvieron lugar en Europa en general, y en Alemania en particular, hace setenta, ochenta y noventa años, y ver que las tenemos aquí entre nosotros en el año 2016”. Una crítica habitual entre los sectores de la izquierda israelí, pero no entre los militares de más alta graduación. Yaalón se mostró entonces favorable a que los mandos del ejército pudieran expresar sus puntos de vista personales en público, opinión no compartida por Netanyahu
Ejecución de un palestino
Los problemas entre ambos comenzaron hace dos meses cuando un soldado israelí remató a un agresor palestino que estaba moribundo en el suelo tras intentar un ataque con cuchillo en Hebrón. Una cámara de una organización no gubernamental israelí grabó la escena completa y el ministro de Defensa condenó desde el primer momento la acción de su hombre, al que ahora se está juzgando. Netanyahu también fue criticó en un primer instante, pero luego moderó su discurso. Lieberman, por su parte, acudió al juicio para mostrar su apoyo total a un militar que, pese a la evidencia de las imágenes, argumenta que remató al palestino porque pensaba que se iba a inmolar.
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Con el regreso de Lieberman al ejecutivo, Israel reemplaza al frente de Defensa a un experimentado general como Yaalón por una político cuya carrera militar acabó con el grado de cabo. La decisión tiene también una lectura en clave internacional ya que se produce a las puertas de la conferencia organizada por Francia para relanzar el diálogo entre israelíes y palestinos y que se celebrará el 3 de junio en París. Una cumbre que busca resucitar la solución de los dos estados, muerta debido al imparable avance de la ocupación israelí en Cisjordania y los barrios del este de Jerusalén. Netanyahu quería reforzar su gobierno ante esta cumbre y a partir de ahora cuenta con los cinco escaños de Israel Beitenu.